El presidente Biden designó formalmente el lunes el antiguo emplazamiento de un famoso internado para niños nativos americanos como monumento nacional y emitió una disculpa formal por la práctica de trasladar por la fuerza a niños a dichas escuelas.
Al presentar a Biden en la Cumbre de Naciones Tribales de la Casa Blanca, la secretaria del Interior, Deb Haaland, la primera secretaria de gabinete nativa americana confirmada por el Senado, describió a Biden como “el mejor presidente para un país indio en mi vida”, acreditando el trabajo de la administración en materia de financiación tribal y falta de recursos. Mujeres Indígenas asesinadas (MMIW). Haaland le entregó al presidente una manta tribal mientras los asistentes coreaban “gracias, Joe”.
Biden declaró formalmente el monumento en el sitio de Pensilvania de la Escuela Industrial India Carlisle, que se estableció en 1879 como la primera escuela de este tipo fuera de una reserva de nativos americanos. Durante las siguientes cuatro décadas, más de 7.800 niños se vieron obligados a asistir a escuelas, donde se les cortaba el pelo y se les prohibía hablar lenguas indígenas o vestir vestimentas tradicionales. Richard Henry Pratt, el fundador de la escuela, describió su misión como “matar al indio, salvar al hombre”.
Los recuentos aproximados estiman que casi 1.000 niños murieron al cuidado de las llamadas escuelas industriales, y la cifra real probablemente sea mayor.
En sus comentarios, Biden calificó el uso de tales escuelas como “un capítulo oscuro que abarcó 150 años… en el que generaciones enteras de niños nativos fueron literalmente robados de sus familiares y tribus y enviados a internados”.
“No borramos la historia, la reconocemos y aprendemos de ella para no repetirla nunca más”, añadió el presidente. “Recordamos para poder sanar, ese es el propósito de la memoria”.
El presidente anunció que la administración desarrollará un “plan de 10 años para revitalizar las lenguas nativas” como parte de los esfuerzos para reparar el conocimiento cultural perdido como resultado de escuelas como Carlisle. El monumento de 24,5 acres en Carlisle, Pensilvania, será administrado conjuntamente por el Departamento del Ejército y el Servicio de Parques Nacionales.