El presidente Biden conmutó el lunes las sentencias de 37 personas condenadas a muerte a nivel federal, y sus sentencias se reclasificarán de ejecución a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
El presidente, al anunciar las conmutaciones, dijo que está “más convencido que nunca de que debemos detener el uso de la pena de muerte a nivel federal”.
Algunos de los indultados incluyen a Billie Jerome Allen, que fue condenada a muerte en 1998, Carlos David Caro, que ha estado en el corredor de la muerte durante más de 15 años, y Len Davis, que ha estado en el corredor de la muerte durante más de 25 años, entre docenas de otros.
“Estas conmutaciones son consistentes con la moratoria que mi Administración ha impuesto a las ejecuciones federales, en casos distintos del terrorismo y asesinatos en masa motivados por el odio”, dijo Biden en un comunicado.
“No se equivoquen: condeno a estos asesinos, lamento las víctimas de sus actos despreciables y duelo por todas las familias que han sufrido pérdidas inimaginables e irreparables”, dijo.
La semana pasada, el presidente anunció indultos para 39 personas y conmutó las sentencias de casi 1.500 más, estableciendo un nuevo récord diario de clemencia centrándose en aquellos que estuvieron bajo confinamiento domiciliario durante la pandemia de COVID-19.
Los indultos y conmutaciones de Biden de este mes se producen cuando ha estado bajo presión para perdonar a más personas después de que concedió uno a su hijo, Hunter Biden, después de insistir durante más de un año en que no lo haría.